Huevos Poché con patatas a lo pobre, carabinero y crujiente de jamón.

Esta receta se basa en una del programa “Cocinamos contigo” de Canal Cocina, y es una variante de una que escribí en el blog hace un tiempo. La receta anterior la podéis encontrar en esta entrada:  Huevo Poché con patatas y cebolla.



En la anterior ocasión, la patata y la cebolla las preparé fritas en una sartén con abundante aceite. Para aligerar el plato, esta vez ha sido al microondas.

Cortamos las patatas con la mandolina en rodajas muy finas, y las lavamos en abundante agua. En un cuenco apto para el micro, colocamos las patatas y le añadimos la cebolla también cortada. Lo tapamos bien con film estirable, dándole más de una vuelta para que quede bien sellado. Salpimentamos y agregamos un chorro de aceite de oliva virgen extra. Le damos marcha al microondas durante siete minutos a potencia máxima.  Si queremos que tengan un color mas tostadito, las podemos pasar un poco por la sartén (sin añadirle aceite).




Mientras podemos preparar el crujiente de jamón. En una bandeja de horno ponemos un papel sulfurizado (apto para cocina), añadimos las lonchas bien extendidas (tienen que ser todas del mismo grosor), y tapamos con otro papel idéntico al anterior. Ponemos otra bandeja encima para que tenga peso. Con el horno precalentado a 180º, las tendremos durante 20 minutos en el horno. Al terminar, retiramos la bandeja y el papel superior. En caliente estarán todavía un poco flexibles. Cuando enfríen, veremos que se quedan muy firmes y crujientes, menos saladas que si las preparáramos fritas.


Para ver como realizar los huevos Poché, os remito a la entrada que he indicado al principio. He añadido unos huevos de codorniz también pochados. La técnica para estos últimos es: Lo primero poner un cazo ancho con agua a hervir. En un cuenco pequeño, agregamos un chorrito de vinagre y cascamos dos huevos con cuidado de no romper la yema. Como estos tienen la cáscara más dura que los de gallina, se puede hacer pinchándola y rompiéndola con cuidado usando un cuchillo de punta. Cuando está el agua hirviendo, con unas varillas de mezclar hacemos círculos en el agua para provocar un remolino y dejamos caer en el centro los huevos con el vinagre. Los huevos empiezan a girar. Retiramos a los pocos segundos a un recipiente con agua fría con una espumadera pues se hacen muy rápidamente.


Ya tenemos las patatas con la cebolla, el jamón crujiente, y los huevos. Solo nos faltan los carabineros. Se puede hacer con cualquier otro tipo de marisco, pero lo bueno de estos es la gran cantidad de jugo que hayen sus cabezas. Les pelamos la cola, dejando el final. Las pasamos por la plancha un par de minutos para que no estén crudas, pero cuidado, tampoco mucho tiempo  más.



Ya solo nos queda montar el plato. Las patatas con la cebolla en la base, y añadimos el resto de ingredientes. Del carabinero pondremos la cola. El jugo del interior de la cabeza lo rociaremos por encima, dándole un extra de sabor a marisco.


Buen provecho !!!